¿Cómo están queridos lectores?, hoy vamos a recorrer la Ruta 2 hasta la intersección con la Ruta 55 en Coronel Vidal, y por esta ultima llegaremos hasta Balcarce, para volver por la Ruta 226 a Mar del Plata, ¿arrancamos?
Salgo en esta tarde fría pero soleada de otoño, a dar esta vuelta de 200 km aproximadamente por la autovía 2, rumbo a Coronel Vidal, distante 62 km de Mar del Plata.
La autovía 2, no esta en optimas condiciones, pero se puede transitar tranquilamente, sobre todo mano a CABA, así que emprendemos este tramo, donde aremos una parada intermedia unos km pasando Vivorata.
Luego de recorrer unos 36 Km aproximadamente, llegamos a Vivorata, pueblo lindante con la Autovía . lo cruzamos y continuamos ruta por unos 8 km. aproximadamente, para tomar un retome e ir a visitar la iglesia abandona que se encuentra sobre la autovía, mano a Mar del Plata.
Luego de una mini sesión de fotos, volvemos a retomar la mano a CABA de la Autovía, y continuamos los 17 km aproximadamente que nos quedan para llegar al cruce de la Ruta 55, en Coronel Vidal.
Tomamos la Ruta 55, hacia la izquierda rumbo a Balcarce / Necochea. En mi caso, el paso a nivel de la ruta estaba cortado por trabajos sobre las vías, por lo que tuve que agarrar un desvió que me llevo hasta la calle Avellandea, donde hay otro paso a nivel, y luego volver del otro lado de la vía, a tomar nuevamente la Ruta 55.
Circulando por la Ruta 55, a 15.5 Km del cruce con la Ruta 2, les recomiendo parar en una bosquecito de unos 500 mts de largo aproximadamente, por donde pasa la ruta, quedando cubierta en ese tramo por la copa de los arboles que forman este bosque. Desde ya es sumamente atractivo en cualquier época del año, pero en otoño es de una belleza sin igual, un lugar hermoso para parar un rato, tomar algunas fotos, apreciar los colores que toman las hojas, y percibir los aromas que se forman.
Eso si, prestar atención a donde uno se detiene, ya que la banquina como se ve en la foto, no esta asfaltada, y en algunos tramos casi no hay, ya que el follaje de los arboles la cubre.
Luego de un rato acá, disfrutando el lugar y el momento y sufriendo el frio, continuamos rumbo a Balcarce.
A medida que nos vamos aproximando al cruce con la Ruta 226, en Balcarce, el paisaje va cambiando y se comienzan a ver mucho mejor las sierras que rodean la ciudad, generando un lugar muy lindo para disfrutar mientras circulamos, ya que tanto adelante, como a la izquierda y la derecha nos topamos con sierra.
Decidí ingresar a la ciudad, para ir a tomar un café con leche (necesitaba calentarme un poco) a "La Estación", lugar donde lo hago habitualmente cuando paso por acá.
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Tuve que sacarme la campera, el buzo el cuello y quedarme solo en remera, ya que el lugar estaba bastante calentito con la calefacción, y si no al salir iba a sentir mucho frio.
Luego del reparado y calentito café con leche, salí de la ciudad, rumbo a la Ruta 226, donde encare el regreso a Mar del Plata.
Los atardeceres en las rutas la verdad son hermosos, pero sobre la Ruta 226, pegando el sol sobre las laderas de las sierras es una belleza, por lo que aproveche a tomarme alguna foto.
Retome camino, y continúe para terminar la vuelta, un un hermoso y frio día de otoño.
En total la vuelta fueron unos 202 Km, con muchas paradas para hacer fotos y disfrutar, al fin y al cabo, de eso se trata la moto.
Espero que les haya gustado esta vuelta, y que puedan encontrar y disfrutar tanto como yo, esos pequeños lugares que les mencione y recorrí.
Si ya los conocen cuéntenme sus experiencias y si no aprovéchenlos para conocerlos.
Noe encontramos en el próximo relato.
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